BRASILIA.- La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, pronunciará mañana en Nueva York el discurso de apertura de la Asamblea General de la ONU en medio de la fuerte crisis que vive su país con EEUU, a raíz de las revelaciones de espionaje practicado por el gobierno de Barack Obama en Brasil, donde la propia mandataria fue víctima directa de estas prácticas.
Según diarios brasileños, el repudio al espionaje estadounidense, en base a documentos secretos filtrados por el ex agente de la NSA Edward Snowden, será uno de los ejes del discurso de la mandataria, cuyo país abre tradicionalmente los debates anuales de la ONU.
Después de buscar apoyo para condenar la práctica y promover acciones de prevención contra la misma en el seno del Mercosur, Rousseff buscará el apoyo de algunos países europeos, también molestos con la intercesión de comunicaciones telefónicas y electrónicas, para presentar una queja formal y comenzar a esbozar algún tipo de reglamentación específica.
La Asamblea será la primera oportunidad en que Rousseff se halle cara a cara con su par de EEUU, a quien desairó la semana pasada al suspender la visita de Estado que tenía prevista realizar el 23 de octubre a Washington, cuando iba a ser recibida con los mayores honores previstos por la diplomacia estadounidense.
Obama será el segundo orador en la cita, después de Rousseff, y generalmente se lleva a cabo una conversación informal entre el presidente brasileño de turno y el mandatario que lo sigue.
Tras las denuncias de que millares de brasileños y ciudadanos de paso por Brasil, la propia mandataria y sus principales asesores, e incluso las computadoras del ente estatal Petrobras fueron espiados por la Inteligencia de EEUU, Brasilia anunció una férrea acción a nivel internacional contra el espionaje estadounidense. (DPA)